DESENCANTO Y POPULISMO
La clase política, esta muy equivocada cuando entiende que
el único veredicto de las actuaciones públicas residen en el sufragio. Las
urnas otorgan el derecho a realizar hasta lo contrario de lo comprometido con
los electores en sus programas. Los gobiernos encomiendan todos sus actos al
dictamen de las próximas elecciones. Y
mientras tanto, el descredito, la desilusión y la creciente creencia de que
toda la clase política es igual aumenta de manera alarmante en nuestra
sociedad. Esto unido a una comunidad sumida
en una gran crisis económica y política, motivan al resurgir cuando no
despertar de populismos totalitarios. Movimientos nacionalistas e identitarios
excluyentes que sacan del cajón, discursos victimitas sobre el declive de la
comunidad, falta de unidad y la necesidad de pureza .A sus odios ancestrales (Democracia,
Multiculturalismo, Inmigrantes, Parlamentarismo) unen un discurso simplista del
buen gobierno que consigue cuajar en un gran número de ciudadanos. No hay que retroceder demasiado en el tiempo, para
reconocer estos discursos y conviene recordar cuales fueron las consecuencias
para Europa. No debemos dejarnos engañar y tenemos que realizar cuanto sea
necesario para impedir el resurgir de estos salvapatrias.
“Los miedos
colectivos generan instinto de grupo que
a su vez refleja ferocidad hacia todos aquellos ajenos al grupo”.
Bertrand Russell.
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